Ingrid Betancourt

Me parece que desde Francia se puede percibir un tanto más la nota sobre Ingrid Betancourt. Una nota del universal y del lemonde señalan que falleció el segundo al mando de las FARC en una ofensiva militar. En París el sábado pasado se ha hecho una cadena humana con la participación de la esposa del presidente que ya es tan famosa como él. Al parecer las revistas están bajándole a eso de hacer competencias para ver quien saca la mejor pose del presidente o el mejor chisme de su ex mujer. En fin que como es esto de la política seguro la negociación de la liberación en Colombia tiene algo que ver con las proximas elecciones munipales en Francia, no tengo ni la remota idea de los partidos en el país, pero por más humanitario que sea el asunto seguro ayudará no sólo al presidente Sarkozy sino también al de Venezuela Hugo Chávez que le convendría bastante lograr el acuerdo para la liberacion y para ser honestos incluso yo también lo vería de mejor manera. Mientras tanto en Francia, las organizaciones civiles hacen lo propio, incluso he visto que en algunas pláticas está presente el esposo de Ingrid. En la radio la hija es entrevistada y al parecer los franceses están puntualmente pendientes de lo que pasa en Colombia. Mientras, en el hotel de Ville aparece la imagen que todos conocemos donde se van contando los días que ha estado secuestrada en la selva colombiana. Lo mismo en el metro, aparecen carteles pidiendo que se libere a Ingrid, las librerías hacen lo propio y venden libros con las cartas que ella ha escrito tiempo antes para su familia.

Me llama la atención esta mujer, no sólo por como los medios franceses mantienen a la sociedad, sino realmente creo que Ingrid Betancourt es alguien que seguramente tiene mucho que decirle a la gente después de todo esto. La veo sin saber el contexto real como una persona que debe tener un caracter entrañable y una inteligencia severa, veo su foto sentada y vestida con una manta en algún lugar de la selva colombiana haciendome pensar en el activismo que se hace para que sea liberada.

Ayer me contó Alán una pequeña historia; mientras yo le platicaba de la ucraniana fea él me decía que conoció a una que era muy amable cuando intentaba enviar una postal en una oficina de correos en Japón que por lo que me contó que le dijo parecía ser que estaba sola y de esto se derivó un pensamiento de lo que me escribía: Una mujer triste de noche asomada en la ventana cerca de la estación de Shimamoto en Japón.